Nota importante

Si decides leer este blog, te aconsejo pasar completamente del índice y leer las entradas ordenadas como bien tienes un menú bien bonito. Porque mayormente tienen su orden lógico y si lo lees desordenadamente, podrías no enterarte de una mierda y opinarás como un gilipollas sin saber una mierda de lo que has leído.

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sábado, 16 de noviembre de 2013

[Paridas Kontinuas] Las cortinas de mi abuela huelen a aceite - Capítulo 1: Extinguiré la raza humana, empezando por mi

Atributos

Autores: Yo y mi colega Chuck.
Género: Humor absurdo.
Nivel de seriedad: -infinito+1.
Recomendaciones: No lo leas si darías tu vida por tu dios.
Otros detalles: Es una lectura con humor cabrón, si te ofendes, chupa un limón.


Cuenta la historia de un hombre llamado Eustaquio, de 32 años que se cagó en Dios y odia muchas cosas de esta vida, para empezar, le duelen los huevos y será por el mal colchón que compró.

Eustaquio estaba buscando su vocación y pulsó [any] key pero no lo consiguió... Tiene una afición que es follarse a bebés muertos, eso sí, él no los mata ya que es un buen hombre, pero tenía un ventilador.

El otro día se casó con su prima de Santa Justa de los Pecados y le hurgó la nariz, se puso tan cachondo que decidió escribir un articulo en la Super-Pop pero se enteró que la empresa cerró... y se mordió el diente. Su mujer dice que lo de follar bebés muertos es un mal hábito pero él le da un chorizo y ella se calla.

Esto es un párrafo.

En su búsqueda para encontrar su vocación se apuntó a un curso de monitor de infantes pero le pegaron un codazo y se sacó el carnet de carretillero, entonces fue a trabajar al Erosky*1 como pescadero, vendió un jamón y le echaron. Luego volvió a su casa y la pintó de verde y decidió que tenía que acabar con su crisis de fe y mató a un monaguillo con un martillo y fue a dar un paseo. Al lado del Erosky (otro, no el que trabajaba...) se encontró un bebé muerto.

-Joder que suerte tengo! - Dijo Eustaquio.
Se lo folló y le pilló una vieja. Se la folló.

Al día siguiente Eustaquio se levantó, se fue al lavabo y se rascó la verga. Encendió la tele y presenció una aparición, se le apareció Jesucristo haciendo el pino y le dijo:

-No cometas pecados hijo mio.
-¿Papá?
-Soy Jesucristo hijo mio.
-¿Mamá?
-No hijo mio. Soy vuestro profeta y vengo a darte una oportunidad para que encuentres la luz y consigas la salvación hijo mio.
-¿Papá?
-Que no hijo mio, no soy ninguno de tus padres biológicos hijo mio. Soy vuestro profeta, hijo mio.
-¿Santaclaus?
-¿Solo sabes hacer preguntas hijo mio?
-Contesta coño. ¿Eres Santaclaus sí o no?
-Que no hijo mio.
-Pues ahí te pudras.

Y Eustaquio se fue al puerto a mojarse los pies en arena.

Jesucristo fue a masticar cebolla y de paso llamó por teléfono a su madre.

-Hola mamá soy Jesús, ¿que hay de cenar?
-¡Lentejas con chorizo!
-¡Joder lentejas otra vez no ostias me cago en Dios!

Eustaquio decidió que iba a matar a todo el mundo y empezaría por sí mismo. Empuñó un cuchillo y se apuñaló en el corazón.

-¿Dónde estoy?
-Sigue la luz.
-¿Qué luz?
-La del final del camino so melón.
-Pero si al final no hay nada.
-Pero date la vuelta tontaco.
-(Se da la vuelta)Sigo sin ver nada.
-Ups lo siento se habrá fundido la bombilla, esperate un momento que llamo al técnico.

30 minutos después...

-Bueno ya está, puedes mirar.
-¡Joder te digo que no hay luz!
-Detrás...
-¡Ah coño!

Eustaquio siguió la luz y era una vieja con una linterna. Luego se puso todo el fondo de Blanco y apareció Jesucristo.

-Hola Eustaquio hijo mio.
-¿Dios?
-Su hijo, pero puedes tratarme como tal hijo mio.
-¿José?
-Vengo a hacerte tres preguntas antes de entrar al Cielo, si no respondes bien siento decirte que irás a las Tinieblas,(de fondo se oye un “uuuuuuh”) hijo mio .
-¿Pero eso no se decidía según se comporta uno en la Tierra?
-¿Y eso quién te lo ha dicho hijo mio?
-Pues la iglesia. ¿Siguiente pregunta?
-¿Cómo hijo mio?
-Comiendo lomo, jodío. ¿Siguiente pregunta?
-¡Me has engañado! De acuerdo, pues solo me queda una pregunta, no te lo pondré nada fácil hijo mio...
-Desenfunda...
-¿Qué hora es hijo mio?
-¡¡¡Mierda no tengo reloj!!!

Las puertas del Infierno se abrieron y Eustaquio se cayó para arriba.
Se despertó en el hospital y se cayó de la camilla. Eustaquio decidió cual sería su vocación... revisador de cortinas, se puso una capa y empezó a volar.

Estuvo días y días... y días volando sobre un perro, dando vueltas alrededor y el perro intentaba alcanzarlo, pero no tenia pulgares. Eustaquio se estrelló contra un mosquito tigre y se cayó encima de Jesucristo que en ese momento estaba haciendo trucos de skate con un patinete.

-Hola hijo mio.
-Que te calles anda.

Y se fue.

Eustaquio se dio cuenta de que no tenía vocación porque no tenía estudios (salvo el carnet de carretillero) así que decidió estudiar y empezar de cero, y fue a una guardería. Entró y se le cayó la baba al ver a los niños, pero se dio cuenta de que estaban vivos y la profesora se le acercó preguntándole.

-¿Qué desea señor?
-Hola es que no tengo estudios y quisiera empezar mi vida de cero, pero no tengo madre que me vuelva a parir.
-Pero si quieres estudiar, no tienes que empezar por una guardería. Te recomiendo que vayas a este centro, es una escuela para adultos.
-¿Para adultos? Eso suena muy bien, ¿tienen porno?
-Eso lo dudo mucho...

La profesora apunta la dirección de la escuela en un papel del Bob Esponja.

Eustaquio visitó esa escuela y pisó el techo antes de entrar a recinto cerrado.

Estudió y se sacó el graduado de la E.S.O. Ya sé que lo he contado muy rápido pero es que el graduado se lo sacó volando.

Bien pues Eustaquio continuó buscando su sendero, su camino, su hilo dental, su vocación en la vida.

En ese precíso momento... después de 3 días, apareció un Madelman del cielo y le dijo:

-¡Hola, soy Madelmán!
-Y yo soy Dafmán no te jode.
-En serio, ¿no me ves las articulaciones?
-¿Y qué quieres?
-¿Yo? Nada, solo vine a cagar.

Se agachó y plantó un pino en mitad de la calle, vino un policía y le multó.

-Qué COOL eres, te has atrevido a cagar en mitad de la calle, osaste mancillar el asfalto (cara de asombro).
-Ya te lo dije, es que yo soy... ¡Madelmán!
-¿Madelein? Al fin te he encontrado, estás viva, ven conmigo (cara de baboso).

El Madelman salió volando y desapareció entre las estrellas, Eustaquio miró arriba asombrado y apareció de detrás del Sol Jesucristo con un tanga rojo.

-Hola de nuevo, ¿quieres ser mi amigo, hijo mio?
-¿Nos conocemos? Me suena tu cara pero ahora no caigo...
-Soy Jesucristo, hijo mio.
-¿El de los chistes?
-¿Qué chistes hijo mio?
-El Chiquito*2 ese, el que dice “Jesufistro pecador, no puedorl jooorl!!.
-Te estamos esperando en el edén hijo mio.
-¿Necesitáis que os revise las cortinas?
-Sí hijo mio.
Y salieron los dos volando al cielo.

Ahí Eustaquio conoció a Dios y plantó un pino sobre él y pisó el techo.

-Bueno señores, ya sé qué le pasa a estas cortinas celestiales.
-¿Qué hijo mio?
-Las cortinas no están.
-Muchas gracias, ¿Cómo podemos pagártelo hijo mio?
-Págame unas cortinas.
-Pero no tengo dinero ¿no lo ves que no tengo cortinas ni yo hijo mio?

Y Espidermán apareció de entre las sombras con unas cortinas como capa.

-¡Jajaja, soy Superespidermán!
-(Jesucristo mira hacia arriba) ¡Mirad hijos míos, tiene unas cortinas! (mira hacia Eustaquio) hijo mio.

Y Jesucristo se fue a comerse las lentejas.

Al mes siguiente Eustaquio se compró un Lanvurllini y una lata de agua y derramó el cocido encima de Jesucristo que pasaba por ahí.

-¡Oh no, me llenaste entero de cocido hijo mio!
-No te pago para que hables puta.

Y Jesucristo se fue a mear.

Eustaquio seguía sin encontrar su destino, su habilidad pagada, su sugus de limón, su real vocación, y decidió ponerse a programar un programa para intentar ser el mejor programador del mundo, pero luego se dio cuenta que el BBCode no era un lenguaje de programación, pero él no se rindió y al fin logró su objetivo, el programa es el siguiente:

#include<stdio.h>
main
{
printf (“Hello world”);
}

Jesucristo dio su veredicto y le mandó al Infierno.

Allí, en el Infierno, se encontró a Jesucristo:

-Cómo tu por aquí hijo mio.
-Me he tirado a tu hija.
-¡Pero si solo tiene 10 años hijo mio!
-No, si digo al bebé.
-¡¿Pero qué dices?! ¿Y está bien hijo mio?
-Estaba muerto cuando llegué. Tranquilo, no le ha dolido.
-Ah vale hijo mio.

Y entonces Jesucristo pilló el patinete y se largó de espaldas.

Eustaquio empezó a soltar alaridos porque le escocía la cadera por culpa de la gomilla del pantalón así que se puso una bufanda... en el cuello.

-Por cierto hijo mio.
-Que mierda quieres cansino...
-¿Podrías rascarme la espalda? No alcanzo al punto donde me pica hijo mio.
-Que te rasque tu padre.

Eustaquio siguió por un pasillo tenebroso de un rojo oscuro iluminado por unas azules llamas, que son más ecológicas, hasta llegar a una gran verja alta con unas gárgolas sin dientes. E intentó abrirla pero no pudo y una de las gárgolas habló:

-¿Tú que mierda haces, acaso estás muerto?
-Tus muertos, déjame pasar.
-Y un cojón en escabeche, aquí no pasa ni Dios.
-Venga si me dejas pasar te doy un Lacasito.
-Ok pero de los naranjas.

La otra gárgola se interpuso:

-¡Pero que mierda te pasa Alberto! Cómo ostias le dejas pasar por un Lacasito, que pareces idiota.
-Pero es que me gustan mucho...
-Eres tontísimo tío... Pero pídele dos, joder que solo piensas en ti nada más y yo que, puto egoísta de mierda...

Eustaquio:

-Mierda, solo me queda uno...
-Bueno hagamos un trato.
-Ok cuenta...
-¿De qué color es el Lacasito?
-Amarillo.
-Ok pues no hay trato adiós.
-Fffffffffffffffffffffuuuuuuuuuuuuuuu!!!!!!


Y Eustaquio se fue volando por un agujero en el techo y salió a la superficie de la tierra. Allí arriba se encontró con Jesucristo:

-Hola hijo mio, ¿Qué tal te ha ido el viaje a las profundidades de las Tinieblas hijo mio?
-Hacía calor.
-Pues quítate esa bufanda hijo mio.
-No.
-Por cierto, ¿y dónde dejaste a mi hija muerta, hijo mio?
-La dejé en el contenedor del Erosky.
-¿Ah y dónde te la encontraste hijo mio?
-En el contenedor del Erosky.........
-Ah... es que he abierto una investigación para encontrar al asesino de mi hija, hijo mio.

Eustaquio se quedo pensando... “Investigar... ¿Podría ser esa mi vocación?...” 

-Oye feo, pues mira te voy a ayudar a encontrar al asesino.
-Oh, muchísimas gracias hijo mio.
-Bueno para empezar, tenemos que interrogar a todos los trabajadores del Erosky.

Así que Eustaquio y Jesucristo fueron al Carrefour*3 y compraron una lechuga, luego fueron al Erosky.


Continuará...

*1 – Erosky = Una empresa de supermercados en España.
*2 – Chiquito de la Calzada = Humorista Español muy concido.
*3 – Carrefour = Otra empresa de supermercados en España.

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